Mauricio llegó a los 16 años a la Escuela Padre Álvaro Lavín de Maipú, sin saber leer ni escribir para cursar tercero y cuarto básico. Gracias a la ayuda académica, económica y emocional que recibió, hoy es un profesional con vocación que avanza día a día.
Desafío
En Chile, existen más de 227.000 menores y jóvenes de entre 5 y 21 años que abandonaron el sistema escolar o que no se matricularon en ningún establecimiento este año.
Lo preocupante es que los marginados del sistema lo son mayoritariamente por su pobreza, porque padecen graves problemas familiares y/o de aprendizaje, y no se ajustan al sistema. No son visibles y no exigen. La exclusión escolar está directamente vinculada a la población con mayor vulnerabilidad social.
Solución
Una forma de abordar este problema son nuestras escuelas de reingreso con modalidad diurna de 2 años en 1. Son espacios educativos con un enfoque pedagógico personalizado y métodos didácticos interactivos, orientados a la restitución del derecho a la educación de niños, niñas y jóvenes que, por distintas razones, tienen trayectorias educativas discontinuas o truncas.
Impacto a largo plazo
Así como Mauricio, los niños, niñas y adolescentes de Súmate tienen todo un futuro por delante. No sólo aprenden a ser alumnos, también encuentran una vocación al obtener aprendizaje y apoyo, lo que les da la seguridad de seguir escribiendo su propia historia para tener mejores oportunidades.
Hoy puedes ayudar a que los alumnos puedan tener un buen año escolar, ¡comprométete hoy con su futuro!

